Ha hecho una travesía pionera al recorrer 7.400 kilómetros sin motor y en 225 días desde Nueva Jersey (EE UU) hasta España. Se trata del robot planeador submarino 'Caballero Escarlata', que ha cruzado el océano Atlántico aprovechando las corrientes marinas, y con la energía de sus baterías de litio, con la intención de recoger datos como la densidad del agua, salinidad o temperatura. El objetivo: investigar el papel del mar en el cambio climático y su impacto en las infraestructuras portuarias.
El proyecto ha sido impulsado en la Universidad de Rutgers La singularidad de este artefacto de 240 centímetros de longitud y conocido también como 'Piolín' es que se trata de una herramienta "limpia", que no utiliza energía contaminante, por lo que podría ser el primer paso para utilizarlo de forma frecuente en estudios oceanográficos e incluso en el futuro para desarrollar un nuevo sistema de transporte marítimo.
El proyecto ha sido impulsado por científicos de la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey, con colaboración del Gobierno de España.
El aparato fue recuperado este lunes a 140 millas náuticas (unos 260 kilómetros) de la costa gallega y este miércoles ha sido entregado por el ministro de Fomento, José Blanco, a Jerry Miller, representante del Gobierno de Estados Unidos. El acto ha tenido lugar en la localidad pontevedresa de Baiona, lugar elegido por ser el primer punto de España donde llegó la noticia del descubrimiento de América en 1492.
A un museo
Está previsto que el robot sea ahora recibido en EE UU por su presidente, Barack Obama. Posteriormente quedará depositado en uno de los museos de la institución Smithsonian y tendrá su ubicación permanente la lado del 'Spirit of St Louis' -el primer avión en cruzar el Atlántico sin escalas- o el módulo de mando del 'Apolo XI'.
Además, una réplica del submarino quedará en Baiona, al igual que las cartas de escolares estadounidenses que transportó el planeador a través del océano. Una de estas misivas fue leída en el acto de este miércoles por un alumno de un colegio de la localidad.
El proyecto ha sido impulsado en la Universidad de Rutgers La singularidad de este artefacto de 240 centímetros de longitud y conocido también como 'Piolín' es que se trata de una herramienta "limpia", que no utiliza energía contaminante, por lo que podría ser el primer paso para utilizarlo de forma frecuente en estudios oceanográficos e incluso en el futuro para desarrollar un nuevo sistema de transporte marítimo.
El proyecto ha sido impulsado por científicos de la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey, con colaboración del Gobierno de España.
El aparato fue recuperado este lunes a 140 millas náuticas (unos 260 kilómetros) de la costa gallega y este miércoles ha sido entregado por el ministro de Fomento, José Blanco, a Jerry Miller, representante del Gobierno de Estados Unidos. El acto ha tenido lugar en la localidad pontevedresa de Baiona, lugar elegido por ser el primer punto de España donde llegó la noticia del descubrimiento de América en 1492.
A un museo
Está previsto que el robot sea ahora recibido en EE UU por su presidente, Barack Obama. Posteriormente quedará depositado en uno de los museos de la institución Smithsonian y tendrá su ubicación permanente la lado del 'Spirit of St Louis' -el primer avión en cruzar el Atlántico sin escalas- o el módulo de mando del 'Apolo XI'.
Además, una réplica del submarino quedará en Baiona, al igual que las cartas de escolares estadounidenses que transportó el planeador a través del océano. Una de estas misivas fue leída en el acto de este miércoles por un alumno de un colegio de la localidad.